martes, 4 de enero de 2011

un poquito de mí

Soy de esas que dice: lo quiero, y lo quiero ya , aunque después soy una cobarde y a la mínima me puede el miedo. Soy muy, muy orgullosa, pero me lo trago todo cuando tengo que pedir perdón a alguien que no soportaría perder. Pienso que el roce hace el cariño, que el cariño lleva al amor, y el amor desencadena en locura, que no tiene por que ser malo. He tratado siempre de buscar un sentido a lo que hago cuando la cago, o cuando digo algo y no sé por que lo he hecho,pero nunca lo encuentro,¿por qué? porque me guío por impulsos, no dejo que nadie me frene si estoy alterada, y me encanta darme la hostia a mí sola. De los errores se aprende.. sí, pero he cometido tantos que debo ser realmente sabia.
No me da miedo la oscuridad, ni tampoco la soledad, de hecho hay veces que la necesito. Cuando todo se te nubla necesitas lágrimas para disipar la niebla, no hay por que avergonzarse de eso, es natural. Tampoco me importa demostrar mis sentimientos a alguien que creo que merece la pena, no me importa que sepa que estoy sufriendo o que estoy tan feliz que podría cerrar los ojos y besarle toda la noche. Siempre pienso mal, le busco el doble sentido a todo, pero nunca lo hago con malicia, solo por pasar un buen rato. Hablo de lo que sea con alguien que sepa que será una tumba, no me importa reconocer mis actos, y mucho menos si son malos o íntimos. Es cuestión de confianza, totalmente.. Y sí , asi soi feliz que eso es lo que importa #


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